Kokonotsu Kagi Capitulo 1

Kanada Ichiro bostezó abiertamente mientras se soportaba la cabeza con un brazo, estaba apoyado en su pupitre mirando por la ventana la enorme cantidad de cerezos que empezaban a florecer. El invierno estaba terminando y con la llegada de la primavera los cerezos del patio de la academia comenzaban a tintarse de rosa que se unía en perfecta armonía con el blanco de la nieve que aun quedaba, en Yokai los inviernos eran bastante largos y nevaba por las noches hasta bien entrada la primavera, aunque luego en verano todo el mundo se asaba por el calor. ¿Quién era él? Un chico de 16 años que se acababa de mudar a aquella ciudad hace ya unos meses, era un alumno que para nada destacaba entre el resto de estudiantes, sus notas no eran precisamente buenas y solo en los deportes conseguía destacar un poco, el típico chico que se duerme en clase, nunca hace su trabajo y que se mete en problemas más a menudo de lo que debería, ¿Qué conseguía todo eso? Pues convertirse en alguien nuevo en el que las demás personas no ven a una buena compañía, en definitiva no tenía ni éxito en los estudios ni éxito con sus amistades, aunque tampoco se esforzaba demasiado en buscarlas.

Bajó la mirada hacia el examen que tenía sobre la mesa… historia, odiaba la historia y por supuesto había suspendido aquel examen, un 34 en la nota… bastante mal le había salido, su padre se enfadaría pero por suerte estaría una semana fuera de la ciudad tendiendo unos negocios y su madre… bueno, su madre nunca había estado, ni la conocía fuera de las fotos que su padre tenía de ella. Cogió el examen sin demasiado cuidado para guardarlo en la mochila, el timbre sonó en aquel preciso instante dando la señal a todos que ya era hora de salir para volver a sus casas. Se levantó el primero, fue el primero en ponerse el abrigo y en recoger la mochila para irse de aquel lugar de una vez por todas. Salió al pasillo y ya había cruzado la mitad cuando alguien le llamó.

-¡Kanada-kun, espera!

Ichiro se giró sonriendo como un bobo, la voz de la única persona de aquel lugar con la que daba verdadero gusto hablar, Shinizu Oyuky. La chica de pelo corto y castaño se colocó al lado del chico que se había detenido para esperarla.

-¿Llevabas prisa? Ibas muy rapido

-¿Eh? ¿Enserio? No me había fijado jajaja

No hacía falta ser un genio para darse cuenta de algo tan evidente, comportamiento de idiota, sonrisa de idiota, risa de idiota… si, cuando te gusta alguien y esta persona esta cerca te conviertes en un idiota.

-¿Te ibas ya a tu casa?

-Si… mi perro debe estar que se sube por las paredes-Contestó el chico mientras trataba de dominar sus palabras para sonar coherente-No soporta estar mucho tiempo solo.

La conversación fue interrumpida cuando un chico rubio pasó por el pasillo rodeado por un gran grupo de chicas, por supuesto el chico no era el centro de atención de las chicas, también lo era de todos los hombres que desprendían odio en su mirada e Ichiro no era una excepción y más aún cuando la chica que lo acompañaba también miraba al chico rubio. Takeshi Akhio era el chico más popular de todo el instituto, su familia era mitad estadounidense lo que explicaba su color de pelo. Akhio era el típico joven perfecto, buen estudiante, buen deportista, simpático, guapo y por supuesto popular entre las chicas y por ende odiado por la mayoría de los chicos del instituto. El grupo pasó rápido mientras aquel chico rubio intentaba hacer caso a todas las chicas pero mientras pasaba el chico dirigió una sonrisa y un saludo rápido a Oyuky, un saludo que ella respondió enseguida.

-L-lo conoces?-Preguntó Ichiro mientras sus celos aumentaban por momentos

-Si, vamos a la misma clase-Respondió la chica mientras ambos comenzaban a andar de nuevo.

-¿Es tan bueno en todo como dice la gente?

-Bueno… yo nunca le he visto hacer nada mal por ahora-Respondió la chica tras pensar un buen rato.

-Seguro que hay algo en lo que le puedo superar-Dijo con resolución el chico.

Oyuky lo miro con una pequeña sonrisa, una sonrisa algo burlona.

-¿Qué pasa?-Preguntó Ichiro con la ceja levantada, extrañado.

-Tienes envidia de él ¿verdad?

-¡¿Qué?! ¡Claro que no! ¿Por qué debería estar envidioso?-Se quejó el chico

Ella como única respuesta se rió y Ichiro puso una cara malhumorada, aunque no le duró mucho al fin y al cabo no podía mantener una actitud enfadada con aquella chica. Como llevaban haciendo desde que se conocieron caminaron juntos hasta sus respectivas casas, vivían a unas calles de distancia entonces siempre volvían e iban juntos al instituto, así se habían conocido y así habían continuado hasta ahora. Sus casas estaban bastante lejos del instituto, tenían que coger un autobús que les dejara cerca o bien el metro aunque este no les dejaba tan cerca, a pesar de que ciudad Yokai no era muy grande tenía una amplia red de transportes para movilizarse por la ciudad y es que había crecido exponencialmente desde que un buen numero de empresas pusieron edificios en aquella ciudad hace unos años, atrayendo con ello a multitud de trabajadores, como el padre de Ichiro, además de que la belleza natural de la playa y los montes con los que colindaba la ciudad y de los templos tradicionales japoneses que habían permanecido casi intactos desde tiempos antiguos, aparte de otros muchos lugares interesantes, habían atraído la atención de muchos turistas a la ciudad, como ya he dicho, Yokai era una ciudad en pleno apogeo.

Ichiro se separó de su amiga cuando llegaron a la casa de ella y continuó solo hasta su casa. Era una vivienda de dos pisos, su padre había tenido mucha suerte encontrando un chollo como aquel, porque la casa lo valía, era mucho mejor que su piso de dos por dos en Tokyo. Abrió la puerta y al instante una montaña de pelo se le abalanzó tumbándolo en el suelo y lamiéndole la cara.

-¡Aghhh! ¡Hans, quita chico!

Hans era un enorme pastor alemán lleno de energía, aunque claro, cualquier perro de su tamaño estaba lleno de energía después de haber estado viviendo en un pequeño piso para ahora mudarse a una casa bastante más grande. Tras una larga lucha el chico consiguió quitarse al perro de encima y lograr que se calmase y se sentara jadeando. Ichiro lo acarició efusivamente mientras el perro volvía a moverse poniéndose tumbado en el suelo con la panza hacia arriba esperando las caricias de su amo. El juego continuó durante casi 10 minutos, intercambiándose posiciones y jugando de diferentes formas, hasta que el chico por fin ordenó al perro que se sentara de nuevo. Se levantó arreglándose la ropa y limpiando todo el pelo que el perro le había dejado encima, entró dentro de casa y cerró una vez el perro hubo entrado, dejó la mochila con brusquedad a un lado y observó el panorama que se le presentaba… la casa era una completa pocilga, el casi ni limpiaba y con la ida de su padre ya nadie lo hacia.

-Limpiare el día antes de que papa llegue…

Le comentó a su compañero el perro y este ladro a modo afirmativo como si entendiera al amo. Ichiro saltó por encima del sofá y cayó encima, tomó el mando de la televisión y la encendió mientras que con la otra mano se deshacía el nudo de la corbata del uniforme del colegio y se desabrochaba un poco la camisa para poder estar más cómodo, Hans se tumbó a sus pies mientras Ichiro pasaba de canal, tenía muchas tareas que hacer pero no las haría, no era nada importante, si se ponía a estudiar fuerte antes del examen todo estaría bien.

La tardé paso, lenta y aburrida, se preparó la cena y sacó de paseo al perro, cenó tranquilamente y cuando se cansó de ver la televisión a las tantas de la madrugada decidió que lo mejor era irse a dormir, era jueves y mañana tenía que ir a clase, aunque se fuera a dormir en ella de todos modos. Estaba subiendo los peldaños de la habitación cuando una explosión cercana hizo retumbar los cimientos. ¿Qué era aquello? Había sido muy cerca, a aquella explosión le siguieron varias más y decidió bajar rápidamente de nuevo a ver que diablos ocurría, Hans gruñía y ladraba sin parar a la nada. Ichiro corrió hacia la puerta y no había salido unos metros de su casa cuando una onda producida por una nueva explosión lo empujó hacia atrás, Hans se colocó junto a el para defenderlo. Ichiro se levantó mareado mientras miraba lo que ocurría, escuchó claramente el silbido de varias cosas metálicas volar y como se clavaban justo sobre él en la pared, también le pareció escuchar un leve gemido ahogado pero todo se apagó cuando notó aquel líquido que le cayó encima, caliente, espeso y con sabor metálico, escupió mientras se echaba hacia atrás arrastrándose y tratando de quitárselo de encima, entonces fue cuando vio de que se trataba… era sangre. Alzó la vista aterrorizado y sobre el había un cuerpo irreconocible desde su posición clavado contra la fachada de su casa por tres largas barras metálicas que mantenían el cuerpo inerte en aquella posición, del cuerpo caía sangre sin parar. Retrocedió arrastrándose torpemente y gritando, tratando de ponerse en pie, Hans ladraba sin parar y antes de que pudiera huir un hombre cayó justo delante de su casa, observando con seriedad el cuerpo clavado, era un hombre anciano de pelo corto y arreglado y de barba cuidada e igual de blanca que el cabello, a pesar de la edad que debería tener se mantenía joven y fuerte, debía medir cerca de dos metros y de hombro a hombro debía haber una gran distancia, pero los ojos de Ichiro estaban fijos en el brazo del hombre el cual pendía de un hilo y en el enorme tajo sangrante que le había abierto el estomago. El anciano dejó de mirar el cadáver para mirar a Hans y luego sus ojos se posaron en Ichiro, el rostro del anciano se contrajo en una mueca de sorpresa.

-Tu… ¿Cómo demonios puedes vernos?

Estuvo muy bueno

mmm... Muy buena la historia n.n me gusto, esta bien desarrollada y tiene ese estilo de Maseru que hace que todo quede bien detallado para imaginarnos todo sin aburrirnos jeje xD es muy buena la idea mucha sangre :E si esto sigue asi me hare un buen lector de esta historia, espero que no quede aqui y que sigan muchos mas caps. ñ.ñ

Nhamelex 3 "Reto Tokio" escribió:mmm... Muy buena la historia n.n me gusto, esta bien desarrollada y tiene ese estilo de Maseru que hace que todo quede bien detallado para imaginarnos todo sin aburrirnos jeje xD es muy buena la idea mucha sangre :E si esto sigue asi me hare un buen lector de esta historia, espero que no quede aqui y que sigan muchos mas caps. ñ.ñ

jajaja tratare de mantener un buen nivel como dios manda con litro y litros de sangre corriendo por las calles de la ciudad xDDD Me alegro de que os haya gustado y espero que la sigais leyendola cando suba mas caps ^^

ummmmmmmmmmmmmmmmmmmmmmmm, me gusto mucho esta historia, espero la sigas ^^, solo encontré que en algunas partes pones cosas mas explicitas de lo necesario, pero me encanto ^^.