Valen mas que eran vacaciones (Soul Eater) 1/5

por Shikei Jue Ene 26, 2012 6:33 pm

.Vale mas que eran vacaciones.
Resumen: Luego de una batalla, Soul se encuentra con su familia, quienes llegaron a invitarlos a unas bien merecidas vacaciones. Luego de planearlo un poco aceptan, pero estando ya en la mansión Evans todo se complica haciendo de aquellas vacaciones de todo menos relajantes.
Historia:
Capitulo 1
Día Libre
-Ahhh –suspiro- que bien se siente tener un día libre de vez en cuando –hablo Soul quien ya contaba con unos lindos 22 años. Caminaba de la mano con una rubia de ojos verdes, quien ahora tenía 21 años y un hermoso titulo de novia.
-La verdad es que si, hace mucho que Shinigami-sama no nos daba un día libre –dijo Maka mientras se acurrucaba en el pecho de Soul. ¡Amaba poder dar esas muestras de cariño! Aunque amaba más cuando Soul se las correspondía.
-Me gusta poder salir con mi linda novia a la ciudad para poder tener un día normal, en vez de tener que ir corriendo hasta un hospital o farmacia para comprar medicamentos y vendajes –dijo deteniendo su andar para abrazar a Maka por la espalda y luego soltar un suspiro cansado. Era un poco estresante llevar esa vida tan ajetreada pero valía la pena cuando, al final del día, ambos volvían a casa y se mimaban un poco.
-jeje, tienes razón, luego de un tiempo se vuelve frustrante la rutina –dijo mientras depositaba un beso en la mejía del Soul. Luego de hacerlo escucho como un par de chicas suspiraban mas que notoriamente celosas. Ahora Soul, ese hermoso y casi modelo, era de su única propiedad y eso le ¡encantaba!
Luego del beso Soul alejo a Maka de su cuerpo para poder darle un beso en los labios y sonreírle dulcemente, seguidamente levanto la mirada para poder ver el gran centro comercial al que habían llegado y de paso ignorar olímpicamente a las mujeres que miraban a Maka con odio.
-Dime, ¿quieres ir ahí? –pregunto señalando el Death Mall.
-Ya que –dijo con una actitud honoraria a la de Soul. A veces le daba algo de gracia tomar la misma actitud que él, aunque ya se le estaba pegando de más.
-Je, parece que tantos años juntos ha hecho que se te peguen mis cosas –dijo divertido mientras la tomaba de la mano para ir a pasar un lindo y tranquilo día en el centro comercial, después de todo, hacia mucho que no iban ¿Qué podría ir mal?
Luego de caminar un buen rato, mirando tiendas, riendo, contando historias, recordando anécdotas, y darse mimos, decidieron parar en un café que estaba dentro del Death Mall. Tras unos cuantos años, Maka había tomado gusto por el café negro sin nada y Soul disfrutaba de una buena taza de café con leche y poca azúcar. Estuvieron sentados en un silencio muy cómodo, ambos con una sonrisa calmada en sus rostros, relajándose, mirando a nada en particular. Eso fue así hasta que Maka miro algo que la alarmo y se reprendió mentalmente por no haberlo sentido antes.
-Soul, mira eso –dijo con un tono de voz algo alarmado. Cosa que extraño a Soul pues ese tono no lo usaba muy seguido.
Soul volteo la cabeza para ver lo que su novia señalaba y casi escupe el café que tenia en la boca. A unos cuantos metros de distancia, estaba un chico de unos 15 años cabello blanco y ojos azules muy claros, y aunque el chico era guapo, no era el motivo por el cual Maka se alarmo. Oh no, claro que no era ese el motivo. Su alarma fue porque aquel joven estaba con lo que seria un tipo de correa que sostenía descuidadamente en su mano y al final de la correa estaba como mascota nada mas y nada menos que UN KISHIN multiforma, que en este momento tenia la apariencia de un perro.
Tras haber recapacitado en aquella escena Soul y Maka se miraron seriamente, se levantaron de sus asientos, pagaron sus cafés y fueron directamente hacia el grupo de chicos que estaban ahí. Si Maka se equivocaba (cosa casi imposible) el animal no debía alterarse con la presencia de ellos dos.
Cuando llegaron donde el grupo de adolecentes, el silencio reino. Las chicas miraban con hambre y un coqueteo muy mal disimulada a Soul y los chicos miraban de forma pervertida a Maka. Ambos ignoraron aquellos hechos. Maka miro a la criatura que se comenzaba a mostrar algo incomoda y a moverse inquieta.
-Oye niño ¿se puede saber que haces tú con un kishin como mascota? –pregunto Soul de mala gana, viendo como aquella criatura se daba color ella misma.
-¿Kishin? ¿Qué diablos es eso? –pregunto el chico con una cara mas que confundida, completamente ignorante que su mascota era un demonio.
-Es esa cosa que tienes ahí –dijo Maka señalando al perro que ahora jalaba su correa, como queriendo correr del lugar.
-Emmm… creo que ustedes se están confundiendo, este es un Husky Siberiano, no un Kishin, ni siquiera conozco esa raza de perro –dijo el ignorante muchacho. A Maka le dieron ganas de soltarle un golpe ante el comentario que hizo pero se contuvo ¿Cómo diablos era posible que un habitante de Death City no conozca un kishin? ¡Eso es el colmo!
Soul, aburrido de tanta palabrería y sin llegar a nada dejo salir una hoja de la muñeca de su brazo izquierda. Al ver eso el perro se agito aun más y luego se escucho un terrible aullido. Aquella inofensiva criatura emitió un brillo enceguecedor para luego dejar ver una gran criatura de alrededor de unos 9 o 10 metros, con la figura aparente de un tigre, su piel estaba cubierta de cosas que parecían escamas verdes, unas enormes garras afiladas salieron de sus patas, al mismo tiempo que en la punta de su cola, apareció una gran pelota con púas. Todo el mundo al ver aquel enorme monstruo, comenzó a gritar y a salir corriendo solo unos que otros, paralizados por el miedo, se quedaron en donde estaban pero al reaccionar se fueron corriendo.
-Ne, Soul ¿estas listo? –pregunto Maka luego de soltar un suspiro aburrido- Adiós día normal de relajación. –dijo tratando de relajar su espalda.
-Si estoy listo –suspiro también-Adiós día de sexo relajante –suspiro pues siempre que combatían cosas así Maka quedaba un tanto cansada y solo quería dormir sin hacer nada especial con él. Se daría un buen gusto con matar y devorarse el alma de ese kishin ¡Le arruino la noche!.
-Pervertido –dijo Maka sonriendo, justo en ese momento se dieron cuenta de un pequeño detalle. Justo a la par de ellos, los mismos chicos seguían parados como idiotas sin moverse, mirando aquella enorme criatura rugir y despedazar el enorme Mall.
-¡¿Qué diablos esperan para largarse de aquí?! –gritaron al unisonó. Como reacción al grito los chicos solo dieron un ligero brinco.
-Vallan a refugiarse –dijo Maka mientras miraba a Soul significativamente. Este entendió y sin esperar a más se transformo en Hoz. Al tenerlo ya en sus manos Maka comenzó a girarlo, no sin antes ponerse sus inseparables guantes blancos.
Cuando estuvieron listos, Maka dio un salto en el aire e incrusto a Soul en el osico del animal el cual levanto una pata para darle un golpe a Maka quien, en un rápido movimiento, puso a Soul para protegerse. Ante la fuerza el golpe salió disparada directo al piso, en donde patino un poco al caer. Durante el tiempo que llevaban combatiendo, los chicos miraban asombrados a Maka y a Soul ¡Pero no se iban y estaban en medio de la batalla!
-¡YA MUERETE DE UNA BUENA VEZ! –Grito Maka mientras saltaba nuevamente al ataque -¡¡CASERIA DE BRUJAS!! –grito para luego dejar salir una gran cantidad de energía que se estrello de lleno en el pecho de animal, el cual chillo. Maka callo al suelo en modo de ataque y sin esperar a que el animal se recuperara lanzo una nueva casería de brujas, que callo en el mismo lugar que el anterior, solo que en dirección contraria, haciendo así, una X.
-Maka, ya deja de jugar –dijo Soul desde el interior de la hoz, aun tanto impaciente. Le gustaba sentirse en batalla pero en ese momento no estaba en condiciones para mantener una pelea por mucho tiempo.
Maka sonrió ampliamente- Esta divertido jugar un poco en el día libre –dijo sonriendo aun mas. Aunque le gustara mucho su día libre, amaba sentir la adrenalina de la batalla recorrer cada centímetro de su cuerpo aunque esa misma adrenalina comenzaba a causarle dolor.
-¡Oigan ustedes dos! –Soul y Maka voltearon a ver sorprendidos a aquella persona que les llamaba y se sorprendieron aun mas al ver que aquel chico, dueño del perro, era quien les gritaba.
-¡YA LARGATE DE AQUÍ! –dijo Maka ya mas que fastidiada del muchacho y del animal que estaba a punto de destruir su tienda favorita. Adivinen cual… Si, una librería.
-¡ONDA ANTI-DEMONIACA! –grito con fuerza mientras, una vez mas, saltaba y encajaba la hoja de la hoz justo en el pecho del animal. Junto mas fuerza para llegar a partirlo por la mitad y luego, finalmente, se vio como su cuerpo se volvía negro y se cortaba en tiras para luego dar paso al alma del kishin.
-Ya era tiempo, Maka –dijo Soul volviendo a su modo humano, mientras que Maka bostezaba. Era obvio que ambos fingían estar bien pero la realidad, es que estaban completamente adoloridos y si no se desmayaban por el dolor, era porque ambos son muy tercos.
-Estos días libres son buenos pero aburridos –dijo como si nada. Tragándose un gemidito de dolor que quiso salir.
Soul camino lentamente hasta lo que era el alma del kishin y descuidadamente se la trago ante la vista atónita de los que lo miraron. No mucha gente (por no decir nadie) estaba acostumbrada a ver a una persona comerse el alma de alguien.
-¿Volvemos a casa, Soul? –dijo Maka sonriendo, luego de toda esa batalla no tenia ni una sola gota de sudor en su frente. Pero si tenía un terrible dolor en su cuerpo cansado y mallugado pues el día anterior habían tenido una misión bastante complicada y tanto ella como Soul habían salido muy mal parados de ahí.
-Me parece bien –dijo encogiéndose de hombros hasta que escucho una voz que lo descoloco completamente.
-¿Soul? ¿Hijo, eres tú? –pregunto una voz que Soul conocía de sobra. Lentamente se giro y miro con horror a la persona que le hablaba.
-¿M-mamá? –dijo a duras penas.
En ese momento Soul se sintió completamente entumecido, mientras que su corazón latía como loco. Estaba al borde de un colapso nervioso y fue peor cuando otra vos conocía de sobra, hablo.
-Parece que lo encontramos después de todo –dijo un divertido Sr. Evans, mirando con alegría a su hijo menor, aunque ese echo a Soul le valió madres.
-¿P-p-papá? –dijo ya casi sin aliento a punto de vomitar el alma que se había tragado recientemente.
-¡Hermanito! –dijo una tercera persona, con un tono muy jovial y alegre, mirando a Soul con una sorpresa muy mal disimulada.
-¡Wes! –dijo mas alarmado que nunca, gritándole a su cabeza que resistiera, pues se sentía al borde del desmayo. El colmo de los colmos fue cuando aquel muchacho de cabello blanco y ojos azul hielo, le grito a Wes “papá” y brinco a sus brazos.
¡¿QUE DIABLOS ESTABA PASANDO!?
Soul ya no pudo con tanta cosa y sencillamente se desmayo.

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Espero les guste